De regreso

Por fin de regreso, ahora si he estado rete-ocupada que ni tiempo de entrar a mi querido blo y de verdad que lo extrañe, así que para no perder la costumbre, aquí va una rápida actualización de lo que pasa cuando tienes mucho trabajo y poco tiempo:

1. Estás mas distraída y cansada de lo normal: Yo no se si tenga una verdadera enfermedad del sueño, pero por más que estoy en continua y frenética actividad no logro quitarme el sueño en todo el día, pero lo peor es que cuando llego a casa, estoy en mi cama y por fin puedo dormir, entonces nooooo, viene el insomnio y me cuesta un trabajo pegar el ojo.... No es justo.

2.-Ahondando un poco más en la parte de distraída, esa, si que me preocupa, el otro día fui a comer a mi casa y abrí una hornilla, como no prendió, abrí la otra, pero no me di cuenta que deje la hornilla totalmente abierta, después de como 12 horas que volví a la casa, obvio olía muchísimo a gas y me di cuenta de mi distracción, la verdad no paso a mayores, abrí ventanas y se ventilo, y por suerte no nos quedamos sin gas =) pero sí me preocupe porque esas sí son cosas serias.

3,. Como estás tan ocupada y en estrés, y se te nota, te puedes dar el lujo de ponerte en huelga de trabajo doméstico (hacer la comida, lavar los platos, guardar la ropa, etc.) y tu Esposito lo entiende y el se encarga de toditito. Tu llegas simplemente te sientas en una silla o en el sillón, te pones frente a la compu y listoooooo.

4.- Te sientes parte de algo más grande y te dejas llevar por la adrenalina del cierre. A ver a ver, explico: en mi trabajo, vendemos cosas, claro esta, y los cierres semestrales, trimestrales o anuales, según sea el caso, son una locura, toda la compañía esta volcada en eso, 2 semanas antes de que acabe el mes el trabajo se incrementa en un 200% la gente esta de prisa, todo debe de hacerse con sentido de urgencia, y se trata de traer hasta lo imposible por que todo se cierre, en consecuencia el estrés y los nervios hacen su aparición, llegar a la cuota puede ser mucha presión y debes hacer todo correctamente, esta situación a cualquiera le desquicia, pero yo he de confesar secretamente que me encanta. Disfruto muchísimo del rush de sentirte útil y con un fin tangible, me encantan las caras de prisas y los ademanes de urgencias, me encanta sentir que lo que hago vale la pena y que al menos en esta época se reconoce.

5.- La culpa te atormenta si tienes algo más que hacer que no sea trabajo, aun cuando en ese momento no tengas un trabajo específico que hacer, de nuevo, como les platicaba que estamos en cierre, la semana pasada tuve mil chamba, pero era el cumpleaños de un amigo querido, este nos había invitado a Acapulco desde hace mucho tiempo y después de algunas negativas de nuestra parte, simplemente no aceptaba un no por respuesta, por más que tratamos de persuadirlo Esposito y yo de que mejor escogiera otro fin de semana pasando el cierre, no quiso, así que ahí me tienes adelantando trabajo como loca, y sintiéndome terriblemente culpable por irme el viernes un poco antes, pegada al teléfono todo el tiempo y esperando que nada pasara...jajaja loooser.

6 Obvio vas a Acapulco, te la pasas muy bien eso si, pero a la hora de salir en la noche, noooo claro que me rajo, estoy mega cansada y super ruquis convenzo a Esposito de que es mejor quedarnos en el depa y no salir, claro es obvio resulto en que nuestros amigos, sí salieron sin nosotros y nosotros como abuelitos a las 12 ya estábamos encamaditos jejeje

Ya ven no fue tanto tiempo fuera, no se habían perdido de mucho pues eso es todo lo que ha pasado, pero debo de reconocer que prefiero mil veces estar con mil chamba que sin nada, así que au revoir que me voy a trabajar.